Las tareas que se realizan en espacios de trabajo confinados generan alto riesgo de accidentes y enfermedades laborales. Por ello, es esencial aplicar estrictos protocolos de cuidado y prevención, para evitar que estas actividades dañen la salud de los trabajadores.
Dentro de las múltiples actividades que conforman el extenso mundo industrial, productivo y de servicios, existen tareas específicas que conjugan mayor cantidad de riesgos de accidentes o enfermedades ocupacionales.
Un ejemplo muy característico es el “trabajo en espacios confinados”, cuyo nivel de peligrosidad es calificado por los expertos como uno de los más altos del mundo laboral.
Esto se debe a que las personas que deben trabajar en espacios confinados, están expuestas a sufrir accidentes muy graves, como:
- Asfixia
- Intoxicación
- Envenenamiento
- Traumatismos
- Electrocución
¿Qué son los espacios de trabajo confinado?
Los espacios de trabajo confinado son lugares de dimensiones muy reducidas, que cuentan con mínimas aberturas de entrada/salida, tienen escasa ventilación y a los que solo se accede de manera esporádica u ocasional (generalmente para realizar tareas de mantenimiento o reparar averías).
No están pensados para trabajar largo tiempo en su interior, y pueden albergar riesgos de distinta índole, como por ejemplo:
- Acumulación de gases tóxicos o inflamables
- Circuitos eléctricos en mal estado
- Contaminación por patógenos
- Presencia de animales e insectos peligrosos
Algunos ejemplos de espacios confinados son
- Arquetas
- Fosas sépticas
- Depósitos subterráneos
- Redes de alcantarillado o saneamiento
- Conductos de ventilación
- Matrices de agua potable
- Túneles o pozos
¿Qué características tienen los espacios de trabajo confinado?
Todos los espacios de trabajo confinado presentan características similares de estrechez, poca accesibilidad y mala ventilación natural.
Asimismo, no fueron diseñados ni pensados para albergar puestos de trabajo continuo, o para que las personas permanezcan durante largo tiempo en su interior.
Por ello, no tienen acceso o salida fácil, ni amplias aberturas que faciliten la evacuación rápida y segura de quienes trabajen en su interior en caso de emergencias.
Además, el nivel de oxígeno suele ser muy bajo, lo cual se suma al hecho de que pueden albergar altas concentraciones de gases y vapores tóxicos o inflamables, basura, residuos orgánicos y objetos cortopunzantes.
Consecuentemente, es indispensable que tanto operarios como supervisores sigan correctamente los procedimientos de seguridad establecidos para desempeñarse en espacios de trabajo confinado.
¿Cuáles son los riesgos y accidentes más comunes en espacios de trabajo confinado?
Las estadísticas de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, y de la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional, OSHA, establecen que cada año mueren en todo el mundo unas 200 personas en accidentes ocurridos en espacios de trabajo confinado.
Más aún, gran cantidad de estos accidentes mortales afectan a quienes realizan labores de rescate en espacios confinados.
Es decir, se trata de una tarea potencialmente mortal, tanto para quienes la realizan, como para quienes tienen la responsabilidad de rescatar a otros trabajadores afectados por un accidente.
Los riesgos y peligros de un espacio de trabajo confinado pueden ser muy variados, según las condiciones específicas de estos lugares, o de las tareas realizadas.
Los ejemplos más característicos son los siguientes:
Asfixia
La escasez de oxígeno en los espacios confinados generalmente provoca situaciones de asfixia, que pueden causar desde desvanecimientos temporales, hasta discapacidad o muerte.
Intoxicación
En los espacios de trabajo confinado a menudo se acumulan gases o vapores tóxicos. Si no se detectan, pueden producir enfermedades, intoxicación aguda o incluso la muerte.
Incendios y explosiones
En los espacios de trabajo confinado también suelen acumularse vapores o gases inflamables. Su presencia genera alto riesgo de igniciones repentinas y devastadoras.
Electrocución
Algunos espacios de trabajo confinado corresponden a cámaras subterráneas para conducción de cables eléctricos. Por ende, pueden producirse contactos directos o indirectos, en especial si hay conexiones expuestas o cables en mal estado.
Riesgos mecánicos
Algunos espacios de trabajo confinado corresponden a maquinarias o equipos de gran tamaño. Estos podrían ponerse en marcha accidentalmente, provocando golpes, cortes, mutilaciones o aplastamientos a los trabajadores que estén en su interior.
Caídas
Las caídas dentro de un espacio de trabajo confinado pueden ser al mismo nivel, provocadas por resbalones; o a distinto nivel, causadas mientras el trabajador desciende o asciende al lugar donde debe desempeñar sus tareas (por ejemplo al bajar o subir de un pozo).
Caída de objetos
Algunos espacios de trabajo confinado tienen pequeñas aperturas que dan a la superficie (como las cámaras de alcantarillado y las arquetas, por ejemplo).
En estos casos pueden caer diversos objetos desde el exterior hacia el interior del espacio confinado, mientras un trabajador está dentro (por ejemplo, herramientas, escombros, residuos, e incluso otras personas o trabajadores).
¿Qué protocolos de seguridad se deben seguir en espacios confinados?
Los múltiples riesgos y peligros que conlleva trabajar en un espacio confinado exige diseñar e implementar protocolos de seguridad muy estrictos.
Estos deben ser dados a conocer a todos los trabajadores que forman parte de los equipos destinados a trabajar en espacios confinados.
También es imprescindible realizar cursos de capacitación constantes, para reforzar los conocimientos y competencias de trabajadores y supervisores.
Además, es esencial realizar charlas de seguridad previas y simulacros para reforzar los respectivos procedimientos de emergencia en estas áreas.
Algunos de los principales ejes de trabajo que debe contemplar un plan de seguridad y prevención de riesgos para espacios de trabajo confinado, son los siguientes:
1. Obtener autorización
Las empresas que realicen trabajos en espacios confinados de la vía pública, deben tener la respectiva autorización emitida por la autoridad laboral y sanitaria pertinente.
Si los trabajos se hacen en un entorno privado, deben ser supervisados por profesionales espacialmente capacitados y certificados, tanto por la empresa como por la autoridad competente.
2. Medir y evaluar la atmósfera interior
Antes de realizar cualquier trabajo, se debe medir acuciosamente la atmósfera interior de un espacio confinado.
La medición debe hacerse desde el exterior, para verificar que el porcentaje de oxígeno no sea menor a 20,5%, y descartar además la posible presencia de gases tóxicos o inflamables.
Esta medición y evaluación debe mantenerse durante todo el tiempo que los trabajadores se encuentren dentro del espacio confinado.
3. Aislar y señalizar la zona aledaña
Los espacios de trabajo confinados deben aislarse, para evitar el ingreso no controlado de energía o de compuestos tóxicos.
También deben instalarse señales que indiquen claramente la realización de trabajos en un espacio confinado, para evitar caída de objetos al interior del mismo o impedir el bloqueo involuntario de los accesos de entrada y salida.
El aislamiento e instalación de señales también es muy importante para impedir la puesta en marcha accidental de máquinas o equipos en proceso de mantenimiento, y que puedan tener operarios en su interior.
4. Ventilar
Si las mediciones previas y permanentes de la atmósfera interior de un espacio de trabajo confinado muestran que es irrespirable, o que hay presencia de gases nocivos, se debe proceder a su ventilación inmediata por todos los medios posibles.
5. Vigilar desde el exterior
Los profesionales o supervisores que vigilen desde el exterior, deben estar en permanente comunicación con los trabajadores que entran al espacio confinado. De este modo, podrán dar la señal de alarma ante cualquier situación de emergencia.
Además, las personas ubicadas al exterior están encargadas de monitorear y comprobar los niveles de oxígeno y gases tóxicos. Esto es vital para prevenir accidentes y asegurar un rescate exitoso en caso de ser necesario.
6. Formación continua
Es fundamental entrenar constantemente a los trabajadores para que estén bien preparados para afrontar los peligros que conlleva trabajar en espacios confinados.
La alta probabilidad de riesgo y la gravedad de los accidentes que pueden ocurrir en estos entornos, hace absolutamente necesario mantener esta formación durante todo el tiempo necesario.
También es vital reforzar la concientización de los trabajadores, mediante charlas periódicas, jornadas de evaluación, prácticas, simulacros de accidentes y otras estrategias similares.
Si no se aplican estas medidas de formación y concientización, pueden registrarse accidentes por descuido o irresponsabilidad, que suelen ser muy frecuentes en las áreas de trabajo confinado.
Algunas de las situaciones de descuido más comunes son las siguientes:
- No reconocer un espacio confinado e ignorar lo peligroso que puede ser.
- No utilizar equipos de protección esenciales como máscaras de oxígeno y trajes sellados.
- Creer que no existen riesgos potenciales.
- Trabajar en espacios confinados sin capacitación y desconociendo los procedimientos de emergencia.
- Trabajar en espacios confinados sin supervisión, ni comunicación con el exterior.
Por otra parte, el personal debe tener la condición física y mental requerida para trabajar en espacios confinados.
Cualquier deficiencia física o mental no detectada a tiempo, puede traducirse en errores, descuidos y potenciales accidentes graves.
La mejor forma de detectar estas situaciones es mediante chequeos médicos especializados, aplicados en forma periódica.
¿Cómo ayuda la tecnología a prevenir los riesgos de trabajar en espacios confinados?
La gestión y prevención de los múltiples riesgos presentes en los espacios de trabajo confinado, requiere procedimientos de seguridad exhaustivos y herramientas de control de alta eficiencia.
Para tales efectos, hoy la tecnología brinda a empresas y organizaciones diversas soluciones digitales, como por ejemplo, la plataforma y app especializada en seguridad de DataScope.
Las múltiples funcionalidades de DataScope brindan respuestas apropiadas a cada uno de los desafíos que implica optimizar la seguridad en los espacios de trabajo confinado.
Mediante checklists digitales podrás:
- Verificar el cumplimiento de los protocolos internos y el respeto de las normativas
- Eficientizar procedimientos destinados a garantizar la seguridad e integridad de los trabajadores.
DataScope te permite, por ejemplo:
- Controlar el uso correcto de los Equipos de Protección Personal.
- Asignar protocolos de seguridad para completar previo a cada inicio de jornada
- Recibir notificaciones cuando una tarea sea completada o esté vencida
- Implementar procesos de gestión completamente trazables
- Contar con documentos firmados de forma digital por todos los trabajadores
- Obtener reportes en tiempo real e integrarlos con otras plataformas como PowerBI
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De este modo, mejorarás significativamente el desempeño de tus equipos en terreno y, al mismo tiempo, incrementarás de manera exponencial la seguridad y prevención de riesgos en todas las tareas realizadas en espacios confinados.
